En el Mensaje para la Jornada Mundial de
las Misiones de este año, el Papa Francisco señala que esta ocasión es
importante “para fortalecer nuestra amistad con el Señor y nuestro camino como
Iglesia que anuncia el Evangelio con valentía”.
En su mensaje, el Santo Padre señala que
la fe es un don precioso de Dios, que necesita ser acogida. Es un don que no se
reserva sólo a unos pocos, sino que se ofrece a todos generosamente y que todo
el mundo debería experimentar la alegría de ser amados por Dios, el gozo de la
salvación. Por lo tanto, es un don que no se puede conservar para uno mismo,
sino que debe ser compartido.
Dice que “el anuncio del Evangelio es
parte del ser discípulos de Cristo y es un compromiso constante que anima toda
la vida de la Iglesia”. “El impulso misionero es una señal clara de la madurez
de una comunidad eclesial (Benedicto XVI, Exhortación Apostólica Verbum Domini,
95). Toda comunidad es “adulta”, cuando profesa la fe, la celebra con alegría
en la liturgia, vive la caridad y proclama la Palabra de Dios sin descanso,
saliendo del propio ambiente para llevarla también a las “periferia”,
especialmente a aquellas que aún no han tenido la oportunidad de conocer a
Cristo”.
A su vez, el Papa Francisco, animar a
todos a ser portadores de la buena noticia de Cristo y agradeció a todos los
misioneros y misioneras, a los religiosos y religiosas y fieles laicos que,
acogiendo la llamada del Señor, dejan su patria para servir al Evangelio en
tierras y culturas diferentes de las suyas. A su vez, hizo un llamado a todos
aquellos que sienten la llamada a responder con generosidad a la voz del
Espíritu Santo, según su estado de vida, y a no tener miedo de ser generosos
con el Señor.
Para leer el Mensaje del Papa Francisco
para la Jornada Mundial de las Misiones 2013, puede ingresar al siguiente
enlace:
Fuente: Conferencia Episcopal Peruana
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